Los cuatro de Ford Heights

El 11 de mayo de 1978, Lawrence Lionberg, de 28 años (que trabajaba en el turno de noche en una gasolinera de Homewood, Illinois) y su prometida Carol Schmal, de 23 años, fueron secuestrados. Schmal fue violada varias veces y ambos recibieron un disparo en la nuca. Hubo una protesta pública por el brutal asesinato.

Los cuatro sospechosos fueron juzgados en 1978. Un testigo, Charles McCraney, afirmó haber visto a Williams, Rainge y Adams cerca de la zona de la escena del crimen en Ford Heights (entonces llamada East Chicago Heights) en el momento del crimen. Un testigo experto del Estado, Michael Podlecki, dijo que al menos uno de los violadores tenía sangre secretoria del tipo A (compartida por el 25% de la población) y que Williams y Adams tenían sangre secretoria del tipo A (un testigo forense independiente determinó en 1987 que Williams y Adams tenían en realidad sangre no secretoria). Podlecki también afirmó que los pelos de la parte trasera del coche de Williams coincidían con los de Lionberg y Schmal. Ninguna otra prueba física coincidía con los sospechosos del crimen. Un convicto, David Jackson, testificó que había escuchado a Williams y Rainge en la cárcel discutiendo el asesinato y la violación (Jackson admitió más tarde que había fabricado esta prueba porque las autoridades le ofrecieron un trato). La fiscalía eliminó a todos los jurados negros del juicio (todos los acusados eran negros y las víctimas del asesinato eran blancas). La policía no informó a la defensa de que un testigo, Marvin Simpson, oyó disparos e identificó a cuatro hombres que huían de la escena del crimen: Arthur Robinson, Juan Rodríguez, Ira y Dennis Johnson (posteriormente se descubrió que estos cuatro eran los verdaderos asesinos). Los familiares de los Cuatro de Ford declararon que estaban en otro lugar en el momento del asesinato. El abogado de los acusados, Archie B. Weston, fue ineficaz, y fue objeto de una audiencia disciplinaria legal en su momento y posteriormente fue inhabilitado para ser abogado por otro delito. Una testigo, Paula Gray, (con un coeficiente intelectual de 55), declaró a los fiscales que había visto a los acusados disparar a las víctimas y violar a Schmal. Sin embargo, retiró su testimonio antes del juicio y los fiscales la acusaron de asesinato y perjurio. Williams fue condenado a muerte, mientras que Adams fue condenado a 75 años, Rainge a cadena perpetua y Paula Gray a 50 años en 1978. Jimerson no pudo ser acusado ya que McCraney no había mencionado a Jimerson en su testimonio y Paula Gray había retirado su testimonio.