Educación

Cómo insertar los tampones

Prepárate

Antes y después de insertar un tampón, asegúrate siempre de que tus manos están súper limpias y recién lavadas. También es una buena idea familiarizarse con su cuerpo, ya que es más fácil insertar un tampón cuando se sabe dónde va. Así que ponte en una posición cómoda (prueba a ponerte de pie con un pie en el borde de la bañera o el inodoro), coge un espejo pequeño y colócalo entre tus piernas y echa un vistazo. Busca tus labios (los labios o pliegues de piel que cubren la entrada de la vagina) y ábrelos suavemente con los dedos para encontrar la entrada de la vagina. Aquí es donde va el tampón.

Desenvuelve

Sujeta el tampón firmemente a cada lado de la línea de puntos y gíralo bruscamente en direcciones opuestas. Retire la parte inferior del envoltorio para que el cordón quede al descubierto y tire de él para que cuelgue. Sujeta el tampón por el cordón y luego retira la otra mitad del envoltorio. Una vez que hayas desenvuelto el tampón, asegúrate de no tocarlo demasiado ni colocarlo sobre ninguna superficie.

Inserta

Los tampones deben sujetarse por el extremo en el que se encuentra el cordón. Intenta mantenerte lo más relajada posible para que los músculos que rodean la vagina no se tensen. Y recuerda colocarte con una pierna en el inodoro o en una silla. Inclina el tampón hacia la parte baja de la espalda e introdúcelo en la vagina empujándolo con el dedo índice hasta donde llegue. Asegúrate de mantener el tampón en un ángulo y no intentes empujarlo en línea recta. Esto ayudará a que todo sea lo más fácil y cómodo posible. El cordón también debe quedar fuera de tu cuerpo para que puedas retirar el tampón fácilmente más adelante.

No deberías sentir el tampón si lo has introducido correctamente. Si sientes alguna molestia de presión puede significar que no has introducido el tampón lo suficientemente lejos o correctamente. Si este es el caso, intenta empujar el tampón más adentro, o retíralo e inténtalo de nuevo. Y no te preocupes, no hay ninguna posibilidad de que empujes los tampones demasiado lejos porque el cuello uterino (la abertura del útero) es demasiado pequeño para que quepa un tampón, así que los tampones no pueden perderse. Sólo recuerda estar relajada y no habrá dramas.

Cambio

Un ligero tirón del cordón te indicará si es el momento de cambiar el tampón. Si el tampón no se desliza fácilmente, puedes dejarlo un poco más. Los tampones deben cambiarse cada cuatro horas aproximadamente, dependiendo de la intensidad del periodo. Pero, el tampón puede dejarse un máximo de ocho horas si no cede.

Retirar

Para retirar el tampón tira del cordón en el mismo ángulo en el que se insertó el tampón. Si no encuentras el cordón, no te estreses, simplemente asegúrate de que tus manos están limpias, ponte en cuclillas y retira el tampón con los dedos.

Deshazte

No tires los tampones y los envoltorios por el inodoro: podrías obstruir el sistema de tuberías y es malo para el medio ambiente. Simplemente envuélvelos en papel higiénico (o mételos en una bolsa) y deposítalos en la papelera o unidad de eliminación de residuos sanitarios.

Este producto puede no ser adecuado para ti. Lea las advertencias del envase antes de comprarlo y siga las instrucciones de uso.

Los consejos proporcionados en este material son de carácter general y no pretenden ser un consejo médico. Si necesita asesoramiento médico, consulte a su profesional de la salud.