Andy Warhol APPetizer – Silver Clouds

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Nubes de plata

Andy Warhol dijo: «Pensé que la forma de acabar con la pintura para mí sería tener un cuadro que flotara, así que inventé los rectángulos plateados flotantes que se llenan de helio y se dejan salir por las ventanas». Estos globos brillantes flotan en la habitación; podemos pasar por debajo de ellos, y al mirar hacia arriba nos reflejamos en sus suaves formas. Los parámetros de la sala se disuelven para convertirse en reflejos inmateriales. Las nubes reaccionan a las corrientes de aire y a los cambios de temperatura, y cuando se tocan se ponen en movimiento. Esto da la impresión de que los globos tienen su propia e incontrolable autonomía. Warhol mostró sus Silver Clouds por primera vez en 1966 en una exposición en Leo Castelli, en Nueva York. Una sala de la galería se dedicó a las Nubes y otra al Papel Pintado de Vaca. No se expusieron pinturas tradicionales. La plenitud y el vacío, la materialidad de la pared y los reflejos inmateriales, la policromía frente a la monocromía, lo escultórico frente a lo pictórico, son algunos de los contrastes que Warhol presentó con esta muestra conjunta de su Cow Wallpaper y los globos de plata. La exposición dejó de ser una sala de ventas para convertirse en un espacio lúdico y experimental. Tras el éxito comercial de sus cuadros, con sus motivos de consumo que los convertían en objetos de coleccionista tan deseados, ahora mostraba una instalación que rechazaba el mercado, y esto en una galería comercial. Ni un trozo de papel pintado arrancado ni un globo desinflado tenían un valor especial en el mercado en 1966. Warhol, que había abordado como nadie el tema del arte como mercancía y parte de la cultura del consumo, intentaba aquí apartarse de los ciclos de mercantilización. Se trata de una especie de juego ficticio del gato y el ratón, ya que el artista era claramente consciente de que el mercado del arte es capaz, en última instancia, de apropiarse de todo tipo de rechazo. Su instalación es un abrupto cambio de posición, una hábil puesta en escena que Warhol comentó lacónicamente: «La pintura era sólo una fase que ya he dejado atrás. Ahora estoy haciendo esculturas voladoras: rectángulos de plata que inflo y que flotan»

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