Todo lo que debe saber sobre las bisagras de las puertas de garaje
Los paneles de las puertas seccionales de garaje se doblan y giran al moverse hacia arriba y sobre su vehículo gracias a las bisagras. Son las pequeñas piezas de la puerta del garaje en las que nadie se fija realmente, pero que todo el mundo necesita para hacer funcionar la puerta. Conectan los paneles de las puertas seccionales entre sí, pero también cada panel con los rodillos. Y aunque las bisagras de las puertas de garaje tienen un aspecto similar, no todas son iguales, pero todas son muy importantes. Así que aquí hay algunas cosas que necesita saber sobre las bisagras.
El papel de las bisagras de las puertas de garaje
Las puertas de garaje seccionales constan de varios paneles, que están conectados con
. Estas también se conocen como bisagras centrales en contraposición a las bisagras de los extremos, que se encuentran en los bordes de cada panel. Las bisagras de los extremos son el punto de unión de la puerta y los carriles de la puerta del garaje. Dado que el movimiento de la puerta es posible gracias a los rodillos que se deslizan por los carriles, hay una bisagra de extremo fijada en el lado del borde de cada panel, aparte de la parte inferior que lleva un soporte. Los rodillos de la puerta del garaje pasan por las bisagras de los extremos y así la puerta se mueve hacia arriba y hacia abajo.
Bisagras para puertas de garaje de bajo calibre frente a las de alto calibre
Una de las principales distinciones entre las bisagras para puertas de garaje es su durabilidad. Esto se define por el espesor del acero y por lo tanto el número de calibre de acero es una consideración importante. Hay que tener en cuenta que cuanto menor sea el número de calibre, más gruesa será la bisagra y, por tanto, más resistente. Por lo tanto, cuanto más pesada sea la puerta del garaje, menor será el calibre de la bisagra que necesite.
Tome como ejemplo las puertas de garaje comerciales. Suelen ser muy pesadas y grandes, por lo que es conveniente trabajar con bisagras de calibre 11. Dado que la parte superior de las puertas pesadas soporta la mayor parte del peso de la puerta, es vital que las bisagras instaladas en los puntos más altos de la puerta sean de acero de calibre bajo.
Ahora bien, la mayoría de las puertas de garaje residenciales vienen con bisagras de calibre 18. En realidad, se trata de bisagras muy finas y, por tanto, susceptibles de sufrir daños y roturas tempranas. Aunque podrían estar bien para las puertas ligeras, siempre es mejor conseguir al menos bisagras de calibre 14 para las puertas residenciales.
Bisagras de seguridad para puertas de garaje
Muchos accidentes de puertas de garaje ocurren cuando los dedos de las personas quedan atrapados en las bisagras. Para evitar este tipo de lesiones, los fabricantes han aportado ideas innovadoras. Las bisagras de seguridad para puertas de garaje no dejan espacio para los dedos, por lo que los accidentes quedan descartados.
Cómo pedir bisagras para su propia puerta de garaje
En las bisagras de las puertas de garaje suele haber un número estampado. Este número indica la posición de las bisagras en la puerta del garaje y así el vendedor puede enviarle el producto correcto. #Las bisagras nº 1 suelen ser las centrales, mientras que las nº 2 son las bisagras de los extremos. Si no encuentra el número, mida la distancia de la bisagra desde la parte inferior hasta el centro del círculo superior. Para hacerlo con precisión, la bisagra debe estar sobre una superficie plana.
Si las bisagras existentes se rompieron antes de lo esperado, consiga unas más fuertes. En otras palabras, consiga bisagras de menor calibre. Cuanto más duraderas sean, más caras serán. Pero en general, su precio no es caro y la diferencia de coste se compensa con la longevidad de las bisagras de bajo calibre, ya que son lo suficientemente duraderas como para soportar la tensión.
Un último consejo: lubrique los puntos de pivote de las bisagras durante el mantenimiento de la puerta del garaje. Los lubricantes les ayudan a funcionar silenciosamente y a resistir a los elementos y, por tanto, a la corrosión que requerirá la sustitución de las bisagras de la puerta del garaje.
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