Recuperación del ictus: ¿Cuánto tiempo tarda?

• Ictus

Ha sobrevivido a la conmoción de darse cuenta de que usted o su ser querido han sufrido un accidente cerebrovascular. Ahora está preparado para la recuperación. Pero, ¿cuánto tiempo tardará?

No hay una respuesta única que se aplique a todo el mundo. El tiempo de recuperación depende de algunos factores importantes:

• Dónde se produjo el ictus en el cerebro y qué funciones dañó
• La rapidez con la que se detuvo el coágulo de sangre o la hemorragia que causó el ictus mediante la intervención médica
• La edad y el estado de salud general de la persona que sufrió el ictus
• La calidad y la amplitud de la rehabilitación posterior al ictus

Algunas personas tienen problemas para hablar, mientras que otras tienen dificultades para entender las palabras pronunciadas por otros.

El impacto de una acción rápida

Un ictus se produce cuando el flujo de sangre al cerebro se interrumpe, ya sea por un coágulo que bloquea el flujo sanguíneo o por una fuga o rotura de un vaso sanguíneo que provoca una hemorragia en el cerebro. El daño cerebral se produce cuando las células cerebrales mueren por falta de oxígeno.

De hecho, cada minuto que no se trata un ictus provoca la pérdida de casi dos millones de neuronas, lo que puede dañar el habla, el movimiento y la memoria de una persona, según los Institutos Nacionales de la Salud.

En el caso de los ictus isquémicos, cuando un coágulo bloquea el flujo sanguíneo, los médicos pueden administrar un fármaco que disuelve el coágulo llamado tPA. Acudir a un hospital para recibir tratamiento lo antes posible tras el inicio de los primeros signos de alerta es extremadamente importante para minimizar el daño cerebral permanente y acelerar el tiempo de recuperación.

La rehabilitación estimula el progreso

La recuperación espontánea se produce para muchas personas en las primeras semanas tras un ictus. Algunos se recuperan por completo y no requieren rehabilitación. El habla o el movimiento vuelven por sí solos.

Muchas personas, sin embargo, obtienen más beneficios de la fisioterapia, la logopedia y la terapia ocupacional. Cada una de ellas aborda áreas del cerebro potencialmente dañadas por un ictus y enseña a la persona a recuperar las habilidades anteriores o a aprender nuevas formas de realizar las funciones necesarias para la vida diaria.

«A menudo la rehabilitación funciona sorprendentemente bien para que… las personas sanen y reparen los circuitos que han sido potencialmente dañados después de que se haya producido un ictus. Esta rehabilitación a veces puede durar semanas; a veces puede durar meses; a veces puede durar días, dependiendo de lo bien que funcione su terapia», dice el neurointervencionista Bryan Ludwig, MD, Presidente de Neurología de Accidentes Cerebrovasculares del Instituto de Neurociencia de Premier Health.

Aprenda más mientras el Dr. Ludwig habla de lo que ocurre después de un ictus.

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Los terapeutas pueden ayudar a las personas a superar estos problemas tras el ictus:

• Dificultades de comunicación. Algunas personas tienen problemas para hablar, mientras que otras tienen dificultades para entender las palabras pronunciadas por otros. Las personas también pueden tener problemas con la lectura, la escritura y las habilidades matemáticas. La mayoría de las personas que sufren un ictus pueden esperar que su comunicación mejore hasta cierto punto. La mejora más rápida se produce en las semanas y meses posteriores al ictus. El progreso se ralentiza entre los seis meses y el año, pero si sigue trabajando en ello, puede seguir viendo una mejora más lenta a lo largo de los años.
• Dificultades de movimiento. Una discapacidad o limitación física es común si ha tenido un accidente cerebrovascular. Cuanto más utilice su cuerpo, más posibilidades tendrá de mejorar con el paso de las semanas o los meses. Establezca objetivos que le ayuden a recuperar la independencia en la vida diaria.
• Problemas de comportamiento y emocionales. Las lesiones provocadas por un accidente cerebrovascular pueden hacer que una persona sea olvidadiza, descuidada, irritable o confusa. Los supervivientes del ictus también pueden sentir ansiedad, ira o depresión. El comportamiento y las emociones pueden mejorar con el tiempo, aunque es difícil estimar hasta qué punto o con qué rapidez ocurrirá esto.

«Si el paciente llega lo antes posible, todas esas terapias conducirán a una probabilidad mucho mayor de que el paciente tenga un período de rehabilitación muy corto y tenga un resultado mucho mejor en el otro lado», concluye el Dr. Ludwig.