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El Centro de Ética y Políticas Públicas anunció el domingo que su presidente, Ed Whelan, «se tomará una licencia» del centro de estudios conservador de Washington después de difundir la semana pasada una teoría conspirativa en las redes sociales relacionada con una acusación de agresión sexual contra el candidato al Tribunal Supremo Brett Kavanaugh.

Después de una reunión especial por teléfono de la junta directiva del EPPC el viernes después de la gresca de Whelan en Twitter, él ofreció su renuncia «a la luz de lo que describió como un error ‘atroz e inexcusable’ al publicar en línea una serie de comentarios que ahora ha borrado y por los que rápidamente se disculpó públicamente», dijo la organización en un comunicado.

La junta directiva declinó la oferta de Whelan de dimitir permanentemente, según el comunicado, y el vicepresidente de la EPPC, Yuval Levin, «estará a cargo» durante el tiempo de ausencia de Whelan.

«La junta directiva se reunirá dentro de un mes para revisar la situación», dice el comunicado.

Más tarde, el domingo, Whelan publicó un comunicado de disculpa.

«Pido una profunda y sincera disculpa a todos aquellos a los que he perjudicado con mi atroz e inexcusable hilo de tuits de la semana pasada -sobre todo, a la persona cuyo nombre hice público erróneamente», dijo.

Al referirse a Christine Blasey Ford, añadió: «También pido disculpas a las víctimas de agresiones sexuales y a la doctora Ford por estos y otros tuits que no abordaron con respetuosa consideración la difícil cuestión de cómo evaluar las acusaciones de agresión sexual. No creo que todas esas acusaciones deban ser aceptadas como verdaderas, y creo además que las investigaciones habituales sobre la motivación, la cognición, la memoria y otras cuestiones que se aplican a otras acusaciones se aplican también a éstas. Pero mis tuits no hicieron avanzar la discusión de una manera constructiva».

Whelan se convirtió en el blanco de rápidas críticas bipartidistas el jueves por la noche después de ofrecer una explicación alternativa sin fundamento para la acusación de Christine Blasey Ford de que Kavanaugh la forzó en una fiesta de la escuela secundaria en estado de ebriedad hace más de tres décadas.

Sus conjeturas, expuestas en una serie de tuits, incluían planos de la casa en la que Whelan dijo que el supuesto asalto podría haber tenido lugar. También presentaba el nombre y la foto de un compañero de instituto de Kavanaugh al que Whelan identificaba como posible sospechoso y postulaba que Ford podría haber recordado mal al juez federal.

POLITICO informó el viernes de que CRC Public Relations, una destacada firma con sede en Alexandria (Virginia), ayudó a Whelan a coordinar el despliegue de su intento de desacreditar el relato de Ford y exculpar a Kavanaugh.

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