Pelea de comida

Una pelea de comida es una forma de comportamiento colectivo caótico, en el que se lanza comida a otros a modo de proyectiles. Estos proyectiles no se hacen ni pretenden dañar a otros, sino simplemente encender una pelea llena de lanzamientos de comida espontáneos. Las peleas de comida pueden ser ejemplos improvisados de rebelión o violencia; sin embargo, también pueden ser eventos planificados. En las peleas de comida organizadas, las «armas» de comida suelen ser de un solo tipo, o de una variedad limitada. En una pelea de comida improvisada se utilizará cualquier alimento que esté a mano.

La Battaglia Delle Arance (La batalla de las naranjas) en Ivrea, Italia

Gemüseschlacht (La lucha de las verduras) en Berlín, Alemania

La Tomatina en 2014

Aunque suelen asociarse a entornos juveniles como las escuelas, las peleas de comida tienen una larga historia en todo el mundo como forma de entretenimiento o pasatiempo público festivo. Tradicionalmente, han sido populares desde la Alta Edad Media en Europa durante las fiestas de temporada, especialmente en verano. Por ejemplo, la española «La Tomatina» se sigue celebrando regularmente cada mes de agosto en la localidad valenciana de Buñol, en la que los participantes se lanzan unos a otros tomates, al igual que la Batalla de las Naranjas, que se celebra en la localidad italiana de Ivrea y en la que, como su nombre indica, se utilizan las naranjas. En las reuniones del Yuan Legislativo de Taiwán se han producido peleas de comida.

Las peleas de comida también se han convertido en un elemento común en la comedia de payasadas, siendo especialmente conocido el gag de la tarta en la cara. Las peleas de comida aparecen con frecuencia en la televisión y los libros infantiles, normalmente como ejemplo de comportamiento infantil, destructivo o imprudente.