Más allá de Las Vegas: Dar un paseo en el tren del Gran Cañón

Esenciales

Los billetes están disponibles en seis clases de servicio diferentes, con precios para 2019 que van desde 67 dólares ida y vuelta en el vagón Pullman hasta 226 dólares ida y vuelta para la clase Luxury Dome o Luxury Parlour. El vagón Luxury Dome cuenta con ventanas panorámicas extragrandes y la posibilidad de situarse en la cubierta trasera del tren, por no hablar de un bar completo, asientos reclinables de lujo y un buffet de sorprendente calidad. Visite la página de reservas para obtener una descripción completa de todas las clases de billetes.

Como los trenes salen relativamente temprano (y hay un espectáculo temático del oeste a gran escala incluso antes de subir a bordo) tiene sentido considerar una estancia de una noche en Williams la noche antes de su viaje. La ciudad cuenta con muchas opciones de hoteles y moteles con buena relación calidad-precio, incluidos lugares situados directamente en la antigua Ruta 66, pero para disfrutar de la experiencia ferroviaria más auténtica es difícil superar el Grand Canyon Railway Hotel, situado justo al lado de las cocheras.

El hotel está gestionado por el propio ferrocarril y, a pesar de haber sido construido en 1995, hace un gran trabajo para evocar la época clásica del ferrocarril del oeste, con un salón de doble altura situado alrededor de una enorme chimenea de losa, grandes pinturas al óleo del cañón y un montón de sofás de cuero. Las habitaciones son bastante funcionales, pero cómodas y grandes, y hay Wi-Fi gratuito, una bañera de hidromasaje y una piscina cubierta. Las habitaciones dobles cuestan a partir de 219 dólares, o se puede optar por un paquete que combina billetes de tren, pernoctación y comidas.