Lo que el mundo puede aprender de la cultura de la ingeniería en Alemania

La destreza de Alemania en materia de ingeniería es indiscutible. Los ingenieros nacidos en el país son líderes mundiales en su campo, reconocidos por su dedicación a la precisión, la función y la potencia. A lo largo de los años, ha mantenido su reputación como uno de los principales exportadores de maquinaria y equipos industriales.

La Revolución Industrial desempeñó un papel fundamental en la catapulta de Alemania al estrellato de la ingeniería. En 1743 se fundó la Academia de Ingenieros de Dresde, donde se impartían materias como las matemáticas, la construcción de fortalezas, la mecánica y el estudio de la maquinaria. La fabricación se convirtió en una industria integral durante este periodo y, en la década de 1890, Alemania era la principal nación productora de acero de Europa. Su liderazgo en la investigación química en las universidades y los laboratorios industriales hizo que el país dominara la industria química mundial a finales del siglo XIX. Durante el régimen nazi, Alemania perdió algunas de sus mentes más brillantes, como Albert Einstein, pero algunas regresaron a la nación después de la guerra. Con el paso de los años, la industria de la ingeniería siguió prosperando y el país se convirtió en una fuerza dentro del campo de la ingeniería mundial.

Los campos de la ingeniería mecánica y de plantas siguen desempeñando un papel importante en la economía de Alemania, a pesar de la crisis mundial que se produjo en la industria automovilística estadounidense. Empresas como Daimler-Chrysler, Volkswagen y BMW son líderes mundiales en sus campos y cosechan enormes beneficios, atrayendo a empleados de todos los rincones del mundo. Los avances tecnológicos combinados con la calidad de la fabricación garantizan que los coches, la maquinaria y los equipos eléctricos y electrónicos alemanes sigan teniendo una gran demanda. Hay un apetito insaciable de ingenieros en sus industrias y miles de estudiantes de todo el mundo han hecho de Alemania su principal destino para obtener un título de ingeniería. Alemania sigue impulsando su reputación haciendo hincapié en un sistema educativo que hace hincapié en los fundamentos de la ingeniería, el aprendizaje práctico y la experiencia práctica.

Mientras que la mayoría de los países del mundo se enfrentan a una escasez de ingenieros cualificados para progresar en sus planes de desarrollo, Alemania tiene dificultades para producir suficientes para satisfacer su demanda. Esto es especialmente lamentable en las economías emergentes, cuyos planes de desarrollo dependen de ingenieros cualificados para innovar y utilizar tecnologías que los impulsen. Al estar muy bien considerados en todo el mundo, existe una feroz competencia entre las empresas para contratar y retener a los ingenieros alemanes. Esto se refleja en los atractivos paquetes de remuneración que se ofrecen a los estudiantes de ingeniería que se gradúan en la región. ¿Qué puede aprender el mundo de Alemania para fomentar una cultura de la ingeniería tan impresionante?

1. Educación de alta calidad

El sistema educativo de ingeniería de Alemania tiene una reputación estelar en todo el mundo. Establecido desde la Edad Media, el sistema profesional es una combinación de aula y empresa, teoría y práctica, aprendizaje y trabajo. Está profundamente arraigado en la sociedad y mantiene estrechos vínculos con los principales actores de la industria y las cámaras de comercio. La cooperación entre las empresas, en su mayoría privadas, y los centros públicos de formación profesional ha hecho de este sistema dual uno de los más atractivos de todo el mundo. Aunque los títulos universitarios están muy bien considerados en la mayoría de los países, más del 50% de los estudiantes que iban a cursar estudios superiores deciden no ir a la universidad y optan por la formación profesional en Alemania. Las empresas privadas suelen sufragar los costes de la formación, aunque les ayuda a ahorrar considerablemente en costes de contratación, ya que pueden identificar y contratar a los talentos tan pronto como hayan terminado el curso. Los aprendizajes y las prácticas se ofrecen incluso a los estudiantes de secundaria para fomentar su interés por los cursos de ingeniería desde el principio y comenzar su carrera con un conocimiento profundo de la actividad de la empresa. Esto genera estabilidad y lealtad, desarrollando empleados que son productivos desde el mismo día de su contratación. Los líderes mundiales deberían emular el sistema educativo alemán, ya que el desarrollo demográfico, la globalización de los mercados, las nuevas tecnologías y los nuevos modelos de organización del trabajo requieren nuevas estructuras de política educativa. Esto ayudará a las instituciones educativas a satisfacer la creciente demanda de mano de obra cualificada por parte de las industrias.

2. Reputación estelar

Las empresas de ingeniería alemanas son famosas por sus increíbles productos. Tienen una calidad superior y muestran una destreza artesanal que no se puede igualar en ningún lugar del mundo. Basta con pensar en los lujosos Mercedes, Audi o Porsche, todos ellos de empresas respetadas y conocidas en todo el mundo. Los ingenieros alemanes también son innovadores y han fabricado algunos de los productos tecnológicamente más avanzados del mundo, como los audífonos de Siemens AG. Los clientes que compran productos alemanes suelen buscar más: tecnología punta o un diseño especial que no se encuentra en ningún otro sitio. Esto ha permitido a Alemania dominar los mercados incluso en plena crisis económica mundial. Otras naciones pueden crear economías estables para sus habitantes estableciendo una marca para sus productos y su artesanía, como se ha visto en el caso de Alemania.

3. Invertir en innovación

¿Sabía usted que la aspirina, el formato musical MP3 y el microscopio electrónico son originarios de Alemania? El ingenio alemán se basa en unos conocimientos técnicos muy profundos, que permiten incluso a las pequeñas empresas alemanas convertirse en líderes del mercado en segmentos muy reducidos. Las pequeñas y medianas empresas de ingeniería dominan la economía y marcan la pauta en el desarrollo y la aplicación de las tecnologías del futuro. El sector de la ingeniería mecánica y de instalaciones es uno de los más innovadores de la nación y su fuerza se ve reflejada en su presencia a nivel mundial. Las inversiones en actividades de investigación y desarrollo se toman muy en serio y el sector gasta miles de millones para promover sus intereses. Alemania es líder internacional en capacidad de innovación y alberga cientos de institutos de investigación, entre ellos algunos de fama internacional como la Sociedad Max Planck y la Sociedad Fraunhofer. Las empresas alemanas siguen mejorando y avanzando en sectores como la industria química, la automoción, la ingeniería médica, la industria de equipos eléctricos y la ingeniería mecánica. Son reconocidas por sus hallazgos en biotecnología, así como en energías renovables para controlar las emisiones y hacer más eficiente la energía. Invirtiendo seriamente en innovación, Alemania ha conseguido mantenerse por delante del resto del mundo y abastecer a los mercados con productos únicos y muy demandados.

4. Apoyo de los dirigentes y de la sociedad

Los dirigentes alemanes tienen en muy alta estima a los ingenieros y han puesto en marcha políticas para continuar el tradicional liderazgo del país en ingeniería. Además, apoyan las actividades de investigación y desarrollo invirtiendo activamente en ellas, aportando miles de millones para facilitarlas. También han establecido programas de divulgación de la ingeniería dirigidos a los estudiantes de secundaria para atraer a más jóvenes a este campo. También están animando a las mujeres y a las minorías a ejercer la profesión. Sus dirigentes han tomado medidas para colaborar con naciones como Estados Unidos y Canadá para crear asociaciones interesantes, reuniendo a las instituciones académicas, la industria y el gobierno. Esto ha mejorado la comunicación sobre los retos mundiales más importantes del siglo XXI y ha expuesto a sus ingenieros a los problemas a los que se enfrenta el resto del mundo. Además, los ingenieros alemanes están muy bien considerados en la sociedad y son elegidos para ocupar puestos de poder, donde pueden influir en las políticas y actuar como modelos para las generaciones más jóvenes. Mientras otras naciones se esfuerzan por modificar la percepción negativa que tienen sus habitantes hacia el campo de la ingeniería, los ingenieros alemanes son valorados no sólo en sus países de origen, sino en todo el mundo.