La prostituta de Zumba Alexis Wright es liberada de la cárcel de Maine tras cumplir seis meses entre rejas
- Alexis Wright fue liberada anticipadamente de su condena de 10meses de condena tras obtener créditos por buena conducta
- Se metió en el todoterreno que la esperaba conducido por su marido Jason Trowbirdge
La prostituta de zumba Alexis Wright ha sido liberada de la cárcel tras cumplir casi seis meses entre rejas – poniendo fin a un escándalo con vídeos sexuales, adulterio y una lista de clientes con más de 100 nombres.
Wright, de 30 años, admitió haber dirigido un negocio de prostitución desde su gimnasio en el centro de Kennebunk, Maine. También confesó los cargos de evasión de impuestos y conspiración.
Salió de la cárcel del condado de York el sábado por la mañana con un traje gris y agarrando una pila de carpetas.
Cuando se le preguntó por el tiempo que había pasado en la cárcel, dijo: «No tengo nada que decir»
Entonces subió a un vehículo deportivo conducido por su marido, Jason Trowbridge.
Trowbridge se ha mantenido al lado de su esposa y de la madre de su hijo pequeño, a pesar de las acusaciones de que ella tuvo relaciones sexuales con más de 100 hombres -y una mujer- por dinero.
Wright cumplió seis meses de una condena de 10 meses después de recibir créditos por buen comportamiento y participar en un programa de trabajo.
El escándalo estalló hace un año en un lugar insólito, una pequeña ciudad conocida por sus playas, el encanto de Nueva Inglaterra y la proximidad a la finca costera del ex presidente George H.W. Bush en Kennebunkport.
El negocio de la prostitución de Wright sorprendió a sus clientes de fitness, pero no a los agentes de policía, que empezaron a sospechar tras recibir quejas sobre gemidos, música alta y hombres que entraban y salían de una oficina que Wright alquilaba al otro lado de la calle de su estudio.
Según la policía, su socio, Mark Strong, de Thomaston, veía cómo se desarrollaban los encuentros sexuales en tiempo real en un ordenador de su oficina de seguros. En un giro en su sentencia,
Wright divulgó que creía que su socio comercial la había engañado haciéndole creer que era un agente secreto que investigaba desviaciones sexuales.
Los fiscales no se creyeron la historia de Wright, y dijeron que los investigadores siguen creyendo que Wright, de 30 años, era «un participante voluntario» en el negocio de la prostitución.
Los registros detallados durante un periodo de 18 meses indicaron que Wright ganó 150.000 dólares libres de impuestos. También cobró más de 40.000 dólares en ayudas públicas, según los fiscales.
Strong, de 58 años y casado y padre de dos hijos, reconoció haber tenido una aventura con Wright y haberla ayudado a poner en marcha el gimnasio, pero dijo que no se benefició de la prostitución. Fue declarado culpable de 13 cargos relacionados con la promoción de la prostitución y condenado a 20 días de cárcel.
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