La Gran Muralla

Valor Universal Excepcional

Breve síntesis

La Gran Muralla se construyó de forma ininterrumpida desde el siglo III a.C. hasta el siglo XVII d.C. en la frontera norte del país como el gran proyecto de defensa militar de los sucesivos imperios chinos, con una longitud total de más de 20.000 kilómetros. La Gran Muralla comienza en el este en Shanhaiguan, en la provincia de Hebei, y termina en Jiayuguan, en la provincia de Gansu, al oeste. Su cuerpo principal está formado por muros, caminos de herradura, torres de vigilancia y refugios en la muralla, e incluye fortalezas y pasos a lo largo de la misma.

La Gran Muralla refleja la colisión y los intercambios entre las civilizaciones agrícolas y las nómadas en la antigua China. Proporciona una evidencia física significativa del pensamiento político estratégico de gran alcance y de las poderosas fuerzas militares y de defensa nacional de los imperios centrales de la antigua China, y es un ejemplo destacado de la magnífica arquitectura militar, la tecnología y el arte de la antigua China. Encarna un significado sin parangón como símbolo nacional para salvaguardar la seguridad del país y de su pueblo.

Criterio (i): La Gran Muralla Ming es, no sólo por el carácter ambicioso de la empresa sino también por la perfección de su construcción, una obra maestra absoluta. Única obra construida por la mano del hombre en este planeta que puede verse desde la luna, la Muralla constituye, a la vasta escala de un continente, un ejemplo perfecto de arquitectura integrada en el paisaje.

Criterio (ii): Durante el periodo Chunqiu, los chinos impusieron sus modelos de construcción y organización del espacio en la construcción de las obras de defensa a lo largo de la frontera norte. La difusión del sinicismo se vio acentuada por los traslados de población que exigió la Gran Muralla.

Criterio (iii): Que la Gran Muralla es un testimonio excepcional de las civilizaciones de la antigua China queda ilustrado tanto por las secciones de tierra apisonada de las fortificaciones que datan de los Han occidentales que se conservan en la provincia de Gansu como por la admirable y universalmente aclamada mampostería del periodo Ming.

Criterio (iv): Este complejo y diacrónico bien cultural es un ejemplo excepcional y único de un conjunto arquitectónico militar que sirvió a un único propósito estratégico durante 2000 años, pero cuya historia de construcción ilustra los sucesivos avances en las técnicas de defensa y la adaptación a los cambiantes contextos políticos.

Criterio (vi): La Gran Muralla tiene un significado simbólico incomparable en la historia de China. Su objetivo era proteger a China de la agresión exterior, pero también preservar su cultura de las costumbres de los bárbaros extranjeros. Debido a que su construcción implicó sufrimiento, es una de las referencias esenciales en la literatura china, encontrándose en obras como la «Balada del soldado» de Tch’en Lin (c. 200 d.C.) o los poemas de Tu Fu (712-770) y las novelas populares del periodo Ming.

Integridad

La Gran Muralla conserva íntegramente todos los elementos materiales y espirituales y la información histórica y cultural que conllevan su destacado valor universal. El trazado completo de la Gran Muralla, de más de 20.000 kilómetros, así como los elementos construidos en diferentes periodos históricos que constituyen el complicado sistema de defensa del bien, incluyendo muros, fortalezas, pasos y torres de balizamiento, se han conservado hasta nuestros días. Los métodos de construcción de la Gran Muralla en diferentes épocas y lugares se han mantenido íntegramente, al tiempo que se sigue reconociendo la incomparable importancia nacional y cultural de la Gran Muralla para China. La integridad visual de la Muralla en Badaling se ha visto afectada negativamente por la construcción de instalaciones turísticas y un teleférico.

Autenticidad

Los elementos existentes de la Gran Muralla conservan su ubicación, material, forma, tecnología y estructura originales. La disposición y la composición originales de los diversos componentes del sistema de defensa de la Gran Muralla se mantienen, mientras que la perfecta integración de la Gran Muralla con la topografía, para formar un elemento paisajístico serpenteante, y los conceptos militares que encarna se han conservado con autenticidad. La autenticidad del entorno de la Gran Muralla es vulnerable a la construcción de instalaciones turísticas inapropiadas.

Requisitos de protección y gestión

Los diversos componentes de la Gran Muralla han sido catalogados como lugares protegidos prioritarios a nivel estatal o provincial en virtud de la Ley de la República Popular China sobre la Protección de Reliquias Culturales. El Reglamento de Protección de la Gran Muralla promulgado en 2006 es el documento legal específico para la conservación y gestión de la Gran Muralla. La serie de planes de conservación de la Gran Muralla, que se amplía y mejora constantemente y abarca varios niveles, desde el plan maestro hasta los planes provinciales y los planes específicos, es una importante garantía de la conservación y gestión integral de la Gran Muralla. La administración nacional de China sobre el patrimonio cultural, y las administraciones provinciales del patrimonio cultural donde se encuentran secciones de la Gran Muralla, son responsables de guiar a los gobiernos locales en la aplicación de las medidas de conservación y gestión de la Gran Muralla.

El Valor Universal Excepcional de la Gran Muralla y todos sus atributos deben ser protegidos en su conjunto, para cumplir con la preservación auténtica, integral y permanente del bien. Para ello, teniendo en cuenta las características de la Gran Muralla, incluida su enorme escala, su distribución transprovincial y las complicadas condiciones para su protección y conservación, los procedimientos y reglamentos de gestión, las intervenciones de conservación del tejido y el entorno originales y la gestión del turismo deberán ser más sistemáticos, científicos, clasificados y priorizados. Se establecerá un sistema de gestión integral eficiente, así como medidas de conservación específicas para el tejido y el entorno originales, a la vez que se podrá formar una relación armoniosa que presente un desarrollo sostenible entre la protección del patrimonio y la economía social y la cultura. Al mismo tiempo, se potenciará el estudio y la difusión de las ricas connotaciones del Valor Universal Excepcional del bien, con el fin de aprovechar plenamente y de forma sostenible los beneficios sociales y culturales de la Gran Muralla.