La forma más rápida de curar una ampolla

Zapatos de trabajo nuevos. Caminó cinco millas en chanclas. No usó calcetines con esas zapatillas.

Ya sea en el talón, en la punta o en la bola del pie, las ampollas son un dolor literal.

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Aquí tienes cómo curarlas lo más rápido posible.

Deja la ampolla en paz

La extraña atracción/repulsión que conlleva una ampolla probablemente te hará hurgar, pinchar, pelar y reventar.

Resiste a la tentación o te arriesgarás a retrasar el proceso de curación.

«La regla de la vieja escuela era reventar una ampolla, pero eso puede provocar una infección», dice Larry Goldfarb, D.C., C.C.S.P., fundador del Centro Médico y de Bienestar de Nueva Jersey.

Para evitar la infección, el Dr. Goldfarb recomienda mantener la zona lo más limpia y seca posible, y dejarla en paz.

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Mantenga la ampolla limpia

Además de lavar cuidadosamente la ampolla con agua tibia y jabón, el Dr. Goldfarb recomienda cambiarse los calcetines varias veces durante el día.

Por la noche, aplique una pomada o crema antibacteriana en la zona, y cúbrala con una tirita.

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Agrega una segunda piel

Necesitas una barrera para permitir que la ampolla sane, dice Scott Weiss, fisioterapeuta y fisiólogo del ejercicio.

Prueba la piel sintética: «Utiliza productos como 2nd Skin y Compeed», dice. «Estos pequeños vendajes transparentes mantienen la ampolla protegida y, si se revienta, absorben el líquido, lo que mantiene la infección a raya».

El Dr. Goldfarb añade: «Después de hacer ejercicio, retira el vendaje, lava la piel alrededor de la ampolla y sécala con palmaditas. A continuación, vuelva a ponérsela o aplique una nueva»

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Mantén la ampolla lubricada

Las ampollas se producen debido a la fricción, explica Weiss: «Las capas de la piel se separan y luego se llenan de líquido como protección.»

Para minimizar la fricción, Weiss recomienda lubricar la zona con vaselina (o aceite de coco) antes de salir a pasear -aplícala encima de la segunda piel o de la tirita.

«Limpia la zona con un jabón suave después», dice, y añade: «Si mantienes la ampolla limpia y protegida, suele desaparecer en un plazo de siete a diez días.»

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El artículo 4 maneras de salir adelante con una ampolla se publicó originalmente en Prevention.com.