Hitler secreto

En Hitler secreto los jugadores se dividen en dos equipos: los liberales y los fascistas, este último también incluye el papel de Hitler. La identidad de Hitler es conocida por todos los demás fascistas, mientras que las identidades de los fascistas son desconocidas para Hitler en partidas con al menos siete jugadores. La distribución de roles depende del número de jugadores en una sesión de juego:

Al comienzo de cada ronda el jugador situado a la izquierda del presidente anterior se convierte en el nuevo presidente (el primer presidente se elige al azar). El Presidente nombra a un candidato para la Cancillería, y todos los jugadores, incluido el gobierno propuesto, votan «Ja!» (sí) o «¡Nein!» (no) a la propuesta. Si más de la mitad de los jugadores votan por el candidato a Canciller, se le concede el cargo. Si tiene éxito, tras la elección, el Presidente extrae a ciegas tres cartas de política, cada una de las cuales puede ser liberal o fascista, de las cuales dos se entregan al Canciller, que a su vez selecciona cuál de ellas será aprobada y promulgada. Hay 6 cartas de política liberal y 11 de política fascista en el mazo al comienzo del juego.

Si la elección de Canciller no tiene éxito, el marcador de elecciones se cuenta por uno y la ronda termina inmediatamente, pasando el papel de Presidente a una nueva elección. Una vez que se han fallado tres elecciones seguidas, la política que se encuentra en la parte superior de la pila del sorteo se promulga sin la supervisión del actual Presidente o Canciller, y el Rastreador de Elecciones se reinicia. El Rastreador de Elecciones también se reinicia si se elige un Canciller.

Mientras que la promulgación de una política liberal no tendrá ningún efecto directo en el juego, la aprobación de una ley fascista puede conceder al Presidente la posibilidad de investigar la pertenencia a un partido de un jugador, comprobar las tres cartas superiores del mazo, asesinar a un jugador o elegir al Presidente de la siguiente ronda.

El juego termina cuando se han promulgado cinco políticas liberales o seis políticas fascistas, y el partido respectivo gana el juego. Además, después de que se hayan aprobado tres políticas fascistas, los liberales pueden ganar la partida si Hitler es asesinado o los fascistas pueden ganar si Hitler es elegido canciller.