Hex: The MMO TCG
Hex era genial. Era extravagante y divertido. Era visualmente interesante. Tenía profundidad estratégica. Era un innovador con estilo. Aunque el juego hizo grandes promesas y no llenó por completo los zapatos que quería llevar, también ofreció suficiente juego para crear un valor de retorno muy rico.
Aprecié el viaje y el desafío de enfrentarme a jugadores que financiaban sus mazos hasta la competitividad, ya que compré platino sólo en algunas ocasiones. Aprendí a afinar mis mazos de campesino y disfruté mucho, mucho, del formato de roca. Había algo para todos, pero no había suficiente para los primeros y muy fieles patrocinadores. También hubo un gran retraso en el contenido de la campaña para un jugador y el multijugador tampoco llegó a manifestarse.
Hice mi parte para animar a otras personas a probar el juego y divertirse con él. Creía en lo que estaba haciendo y en lo que podría haber sido.
Cory, gracias por compartir tu visión con el mundo del juego. Estoy seguro de que te costó mucho y fue duro lidiar con los contratiempos y las amenazas de litigio. Estoy seguro de que has aprendido mucho sobre el desarrollo de juegos. Si te gusta, estoy seguro de que puedes volver y encontrar mejores formas. Subvender, sobreentregar. Etc.
También, gracias a todo el talento de la compañía. Desarrolladores, artistas, representantes de la comunidad.
Gracias, por último, a todas las demás personas que jugaron al juego. Especialmente a los que estuvieron hasta el final. Me lo pasé en grande jugando con vosotros. Recordaré Hex con cariño.
WotC no es dueña del concepto de un juego de cartas ni de los elementos básicos de diseño como el arte de las cartas, el texto, las estadísticas y la mecánica. Para futuras referencias, declina el acuerdo. Me da igual que la gente piense que era un clon de MtG o no. Ese debate no es relevante para mí. La propiedad intelectual crea una falsa sensación de derecho no sólo a las ganancias, sino a la capacidad de bloquear a la competencia elementos y mecánicas de juego fácilmente reproducibles de los que no debería tener el monopolio. Hace mucho más por perjudicar a negocios como la industria del juego que por liberar su pleno potencial creativo.
Felicidades, WotC. Ya no compro vuestros productos. Fui partidario durante mucho tiempo desde principios de los 90. Vuestro negocio conlleva un enfoque tóxico y litigioso que sirve más a vuestros abogados que a nadie, especialmente a vuestros clientes. La mejor manera de tener un negocio es crear valor que la gente quiera, no ser el proverbial matón que derriba los castillos de arena de los demás. Así es. Tú haces castillos de arena. También los hacen otras personas. A veces esos castillos se parecen porque la base de arena requiere una estructura similar. Pero lo que importa a la gente que compra tu producto es cómo lo esculpes y afinas tu creación, porque si es bueno seguirán viniendo aunque el mercado esté lleno de alternativas.
De nuevo, gracias, y feliz año nuevo amigos. ¡Que estéis bien! ¡Tiempo de nuevas aventuras! 🙂
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