Geoglifo

La figura prehistórica de la colina inglesa del Caballo Blanco de Uffington

Quizás los geoglifos más famosos sean las líneas de Nazca en Perú. El significado cultural de estos geoglifos para sus creadores sigue sin estar claro, a pesar de las numerosas hipótesis. Las «obras de los ancianos» en Arabia, «estructuras construidas en piedra que son mucho más numerosas que (las) líneas de Nazca, mucho más extensas en el área que cubren y mucho más antiguas», han sido descritas como geoglifos por Amelia Sparavigna, profesora de física del Politécnico de Turín en Italia. El uso de este término para describir estos elementos es probablemente inexacto, ya que investigaciones recientes han demostrado que la mayoría no fueron construidos principalmente como arte, sino que fueron construidos para servir a una serie de propósitos, incluyendo sitios de enterramiento y costumbres funerarias, ayudando en la captura de animales migratorios, y como áreas despejadas para campamentos, casas y recintos para animales.

Las Líneas de Nazca en Perú. Esta fotografía tomada en diciembre de 2006 muestra el colibrí

Desde la década de 1970, se han descubierto numerosos geoglifos en terrenos deforestados de la selva amazónica, en Brasil, lo que ha dado lugar a afirmaciones sobre civilizaciones precolombinas. A Ondemar Dias se le atribuye el primer descubrimiento de los geoglifos en 1977 y a Alceu Ranzi el de profundizar en su descubrimiento tras sobrevolar Acre.

Otras zonas con geoglifos son los megalitos de los Urales, el sur de Australia (el Hombre de Marree, que no es antiguo, sino una obra de arte moderna, con orígenes misteriosos), el oeste de Australia y partes del desierto de la Gran Cuenca en el suroeste de Estados Unidos. Las figuras de las colinas, los laberintos de césped y los laberintos de piedra de Escandinavia, Islandia, Laponia y la antigua Unión Soviética son tipos de geoglifos.

El sur de Inglaterra cuenta con una serie de figuras equinas y humanas talladas en las laderas de tiza. Algunos ejemplos son el caballo blanco de Uffington, el gigante de Cerne Abbas, el caballo blanco de Westbury, el caballo blanco de Cherhill y el hombre largo de Wilmington. Algunos son antiguos, otros de los últimos siglos.

En Kazajistán se encuentran más de 50 geoglifos.