El pan de ajo y el queso a la plancha combinan dos cosas hermosas

En la época en que Dominique Ansel saltó a la fama por su Cronut, no pude evitar pensar que había perdido una oportunidad de marketing. No mucho antes, inventé mi propio híbrido de carbohidratos salvajemente delicioso: el queso a la parrilla con pan de ajo. (¿Es «inventado» una palabra apropiada para algo que seguramente existía antes aunque yo lo desconocía por completo?). Es todo lo que te gusta de un queso a la parrilla, pero con más ajo. Es decir, es muy, muy bueno.

Empezó cuando estaba haciendo pan de ajo, usando esta receta. Tenía más mantequilla con ajo y perejil de la que necesitaba, y la necesidad de no desperdiciarla. Al día siguiente, al examinar mi nevera, vi un poco de queso cheddar, unas cuantas rebanadas de pan y esa bombilla de dibujos animados que aparece cuando se te ocurre una buena idea💡. Ahora directamente me salto el paso del pan de ajo y hago la mantequilla de ajo exclusivamente para el queso a la plancha. Reduzco a la mitad la receta mencionada, picando 1 diente de ajo y machacándolo hasta convertirlo en una pasta con ⅛ de cucharadita de sal. Luego mezclo ¼ de barra de mantequilla ablandada sin sal, ½ cucharada de aceite de oliva y 1 cucharada de perejil de hoja plana picado. Funcionaría igual de bien con la mantequilla de ajo de una receta de pan de ajo de su elección, o puede improvisar -mantequilla + ajo + perejil es una combinación bastante inconfundible.

A continuación viene la unión de la mantequilla de ajo y el queso a la parrilla. Cojo dos trozos de pan Pullman y paso la mantequilla de ajo por un lado de cada rebanada. A continuación, pongo un poco de mantequilla (mantequilla normal, no mantequilla con ajo) en una sartén a fuego medio, y dejo caer un trozo de pan en la sartén, con el lado del ajo hacia abajo. Luego lo cubro con un poco de queso cheddar y el otro trozo de pan, con la cara de ajo hacia arriba. Cocino hasta que la parte inferior del pan esté dorada, unos 4 minutos, y luego le doy la vuelta, añadiendo un poco más de mantequilla normal, y cocino hasta que el otro lado esté dorado y el queso esté bien derretido. (Para que conste, básicamente hago esta receta, cambiando la mantequilla de ajo por la mayonesa).

Y luego me lo como y espero a que lleguen los derechos de autor de mi «invento».