Drama del vestido: El cambio de vestuario de última hora de Amal Clooney en la Met Gala

Cada año (este excluido, por desgracia) vemos más y más vestidos y trajes fabulosos adornar las alfombras rojas de la Met Gala, uno de los eventos más codiciados en los calendarios de los fans de la moda. Pero, ¿qué sabemos de la historia que hay detrás de algunos de estos vestidos de diseñador? Naturalmente, hay una interesante historia de fondo detrás de bastantes.

En esta ocasión, echamos un vistazo al traje de Amal Clooney en la Met Gala 2018 y a lo que ocurrió entre bastidores.

La abogada de derechos humanos, Amal Clooney, causó una gran controversia en el evento de 2018 cuando supuestamente se puso en contra del aclamado diseñador Tom Ford por su elección de atuendo para la Met Gala.

Como copresentadora de la velada de ese año, todas las miradas estaban destinadas a ella cuando agració a la multitud con una magnífica combinación de pantalones y capa de Richard Quinn. Su corpiño tenía un acabado de brillo metálico celestial (adecuado teniendo en cuenta el tema de Cuerpos Celestiales: La moda y la imaginación católica de ese año), su pantalón pitillo azul marino era aerodinámico y elegante, y en conjunto actuaba como un gran complemento para su cola de gran tamaño embellecida con delicados motivos y bordados florales.

Su aspecto era la encarnación de un ser celestial, y el diseñador Richard Quinn incluso recibió un premio de diseño británico de manos de la reina Isabel ese mismo año. Sin embargo, no fue su elección original, de ahí la polémica.

Originalmente Amal fue abordada por Tom Ford para llevar uno de sus diseños en la alfombra roja -un vestido carmesí completo personalizado diseñado para emular el juego de luces que se ve a través de las vidrieras-, pero cambió de opinión para ir con el traje ‘de reserva’ de Richard Quinn en el último minuto. Según Page Six, Vogue instó a Amal a que se quedara con la elección original de Tom Ford, pero ni siquiera la gran influencia de Anna Wintour fue suficiente. La misma fuente afirma que cuando ella le comunicó a Ford su decisión, él y el equipo se mostraron: ‘molesto obviamente’, y le dijo que ellos: ‘preferirían que Amal no llevara el vestido en absoluto si no lo iba a llevar en la alfombra roja de la Met Ball.’

Al más puro estilo atrevido de Amal Clooney, negó también estos deseos, poniéndose el vestido de Tom Ford una vez dentro del recinto (donde notoriamente no se permiten los teléfonos) y lo llevó a la fiesta posterior privada.

Honestamente, nos alegramos bastante de su rebelde sacrilegio, ya que significó que el precioso vestido al menos pudo ver la luz del día. El vestido rojo con efecto de vidriera no sólo costó varios miles de dólares, sino que también se tardó varias semanas en confeccionarlo. Nunca dejes que algo bueno se desperdicie, ¿verdad?

Las insinuaciones de Wintour para que la estrella se ciñera al plan principal fueron un astuto intento de evitar el bochorno diplomático, dado que Clooney fue copresidente del baile ese año y también apareció en la portada de mayo de la revista.

A pesar de su decepción, se mostró muy amable cuando habló de Amal y del evento en el programa The Late Show with Stephen Colbert la noche siguiente, diciendo:

‘Llevó un vestido increíble en la alfombra roja que fue diseñado por un joven diseñador británico llamado Richard Quinn, pero estaba hecho de papel de aluminio, por lo que le preocupaba un poco que pudiera romperse durante la noche, así que fue a la tienda de regalos y se puso este extraordinario vestido de Tom Ford que está diseñado para parecer una vidriera.’