Diagnóstico y pruebas

Los síntomas de la gastroparesia son similares a los que se presentan en una serie de otras enfermedades. Cuando los síntomas persisten en el tiempo o vuelven a aparecer, es el momento de acudir a un médico para que diagnostique el problema. Un diagnóstico preciso es el punto de partida para un tratamiento eficaz.

El diagnóstico de la gastroparesia comienza con un médico que pregunta sobre los síntomas y las experiencias médicas y de salud anteriores (historial), y luego realiza un examen físico. Es necesario revelar cualquier medicamento que se esté tomando.

Es probable que se realicen pruebas como parte del examen. Éstas ayudan a identificar o descartar otras condiciones que podrían estar causando síntomas. Las pruebas también comprueban si hay algo que pueda estar bloqueando u obstruyendo el vaciado del estómago. Algunos ejemplos de estas pruebas son:

  • un análisis de sangre,
  • una endoscopia superior, que utiliza un visor flexible para observar el estómago,
  • una serie gastrointestinal superior que observa el estómago en una radiografía, o
  • una ecografía, que utiliza ondas sonoras que crean imágenes para buscar enfermedades en el páncreas o la vesícula biliar que puedan estar causando síntomas.

Si -tras la revisión de los síntomas, los antecedentes y la exploración- el médico sospecha que se trata de una gastroparesia, es necesario realizar una prueba para medir la rapidez con la que se vacía el estómago para confirmar el diagnóstico.

El vaciado gástrico lento por sí solo no se correlaciona directamente con el diagnóstico de gastroparesia. (Pasricha PJ, et al. Clin Gastroenterol Hepatol. 2011 July.)

Pruebas de vaciado estomacal

Hay varias formas diferentes de medir el tiempo que tarda la comida en vaciarse del estómago al intestino delgado. Entre ellas se encuentran la gammagrafía, la cápsula de motilidad inalámbrica o la prueba del aliento. Su médico le proporcionará detalles sobre la elegida.

Estudio de vaciado gástrico (gammagrafía)
La prueba diagnóstica de elección para la gastroparesia es un estudio de vaciado gástrico (gammagrafía). La prueba se realiza en un hospital o en un centro especializado.

Se trata de ingerir una comida blanda de alimentos sólidos que contiene una pequeña cantidad de material radiactivo para que pueda ser rastreado dentro del organismo. El abdomen se explora durante las horas siguientes para ver la rapidez con la que la comida sale del estómago. Un radiólogo interpretará el estudio a intervalos periódicos después de la comida.

El diagnóstico de gastroparesia se confirma cuando el 10% o más de la comida sigue en el estómago después de 4 horas.

Otros métodos para medir el vaciado gástrico incluyen una cápsula de motilidad inalámbrica y una prueba de aliento.

Cápsula de motilidad inalámbrica
La cápsula de motilidad inalámbrica ingerible (SmartPill) se traga y transmite datos a un pequeño receptor que lleva el paciente. Los datos recogidos son interpretados por un radiólogo. Mientras se realiza la prueba, las personas pueden seguir con su rutina diaria. Al cabo de uno o dos días, la cápsula desechable se elimina del cuerpo de forma natural.

Prueba del aliento
La prueba del aliento consiste en ingerir una comida que contenga un componente no radiactivo que pueda rastrearse y medirse en el aliento durante un periodo de horas. Los resultados se pueden calcular para determinar la rapidez con la que se vacía el estómago. Esta prueba se realiza en la consulta del médico.

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