Crema casera de café con avellanas

Esta crema casera de café con avellanas sólo se tarda 5 minutos en hacer y es un básico en la cocina. Hecha con 3 simples ingredientes, es mucho más saludable que la crema comprada en la tienda.

Yo crecí tomando café con avellanas.

No necesariamente porque fuera mi sabor favorito de café, sino simplemente porque era lo que mis padres compraban. Así que durante todos mis años de consumo de café, eso era todo lo que tenía.

Así que cuando mi madre dejó de comprar café de avellana hace un año y lo cambió por café normal, no noté realmente la diferencia. Pero como a ustedes les encantó mi última receta de crema de café, que podría ser la mejor crema de café de vainilla francesa que jamás encontrarán, y como muchos de ustedes pidieron una versión con avellanas, me puse a trabajar.

En el momento en que saqué el extracto de avellana y percibí su aroma, me invadió una repentina ola de nostalgia. Todos esos años. Todo a la vez. Fue un poco abrumador.

Pero continué con la receta. Una vez que terminé, vertí la crema en una taza de café y tomé un sorbo, y estaba en casa. Bueno, quiero decir que obviamente estaba en mi casa, pero cuando me tomé ese pedacito de café con avellanas, en ese instante, estaba en casa.

Apuesto a que te estás preguntando cómo hacer esta crema de café con avellanas súper sencilla, de 3 ingredientes, así que ¡comencemos!

Empieza por verter 2 tazas de media crema en un tarro de un cuarto de galón.

También puedes usar simplemente 1 taza de nata para montar y 1 taza de leche si no tienes media crema a mano.

Luego vierta 1/4-1/2 taza de jarabe de arce puro o miel. Dependiendo de lo dulce que te guste el café, añade más o menos edulcorante. A mí me gusta usar 1/4 de taza.

Yo prefiero usar sirope de arce en la crema de café porque se mezcla mejor con la media leche que la miel. La miel es mucho más espesa y puede tardar más en mezclarse con la crema.

Y ahora la parte más importante: el extracto de avellana. Añade una cucharadita más o menos, dependiendo de lo fuerte que quieras el sabor.

Además, se me ocurre añadir que el extracto de avellana que utilicé era transparente y por eso apenas se ve en la cucharadita.

Entonces sólo hay que tapar el tarro y darle un buen batido y ¡voilá! Tu propia crema de café de avellana casera. Fácil, ¿verdad?

Así que las razones por las que necesitas esta crema en tu vida, aparte del hecho de que hace que el café sea delicioso…

Por un lado, es muy conveniente. Las personas que beben crema de café comprada entienden la conveniencia. Bueno, todo lo que tienes que hacer es pasar menos de 5 minutos una vez a la semana batiendo un lote de esta crema de café de avellana, y BAM-la misma conveniencia, menos aditivos de miedo, más delicioso.

Lo sé, soy una especie de genio …

Esta crema hace el café delicioso. Y es fácil de hacer. Suficiente razón para hacerla, ¿no?

Aquí tienes la receta:

Si te ha gustado esta receta, te encantará esta Crema de café casera de vainilla francesa o esta Crema de café casera de especias de calabaza.