Algunas reglas básicas

Acomodarse a todas sus necesidades no es bueno

A medida que su cachorro crece, también lo hará su necesidad de imponerse. Los cachorros suelen elegir la hora de la comida como campo de batalla. Pero ceder ante él es un error. Tienes que asegurarte de que sabe que no vas a responder a todas sus demandas. También tendrás que conseguir que acepte que tú y el resto de la familia hagáis vida a su alrededor. Por ejemplo, los cachorros pueden volverse muy territoriales y posesivos respecto a su cuenco de comida y armarán un escándalo si se les acerca mientras comen. Este comportamiento puede llegar a ser bastante difícil y antisocial, por lo que debes ponerle fin. No es demasiado difícil de conseguir, sólo requiere paciencia. Sigue los siguientes pasos y tu cachorro debería desarrollar unos modales perfectos en la mesa.

Menos es más

Pon una pequeña cantidad de comida en el cuenco de tu cachorro y aléjate. Cuando se la termine, vuelve al cuenco y pon un poco más. Esto le ayudará a anticiparse a tu acercamiento.

Mantenlo contento

Sabrás que está contento cuando su cola empiece a moverse cuando te acerques, pero ahora tendrás que acostumbrarlo a que te acerques mientras está comiendo.

Todo junto

Ahora estás listo para ponerle toda la comida de una vez. Ponte de pie o siéntate cerca de él y añade una golosina especial a su cuenco mientras come. Háblele suavemente y acarícielo mientras deja caer la recompensa en su cuenco. Repita esta operación cada varias comidas hasta que su cachorro se sienta totalmente tranquilo.

La milla extra

Su cachorro debe aprender que las personas que le rodean, especialmente los niños pequeños, pueden ser imprevisibles. Pero tiene que aceptar que este comportamiento no es amenazante. Puede ayudarle a hacerlo imitando el comportamiento de un niño: intente acercarse rápidamente a su cuenco y deje caer una golosina. Choca suavemente con él, mientras come, o haz rodar juguetes cerca, cualquier cosa que provoque una distracción, pero deja caer una golosina en el cuenco para premiarle por seguir comiendo tranquilamente. Hazlo de vez en cuando, pero no en cada comida. Si su cachorro se queda paralizado a mitad del bocado, gruñe o le mira mal, deténgase y vuelva a intentarlo en otro momento. Si esto continúa, lo mejor es buscar el consejo de un entrenador de animales. Haga clic aquí para obtener más información sobre el adiestramiento