Alfonso Reyes

Alfonso Reyes nació el 17 de mayo de 1889 en Monterrey, Nuevo León. Estudió en la Escuela Nacional Preparatoria y en la Facultad de Derecho de la Ciudad de México. En 1909 fue uno de los fundadores del Ateneo de la Juventud. Fue secretario de la Facultad de Estudios Superiores, donde también impartió el curso de historia de la lengua española y de literatura española. Su primer libro, Cuestiones estéticas, apareció en 1911.

Reyes se licenció en Derecho en 1913, y ese año fue nombrado segundo secretario de la legación mexicana en Francia. En 1914 viajó a España, donde se dedicó a la literatura y al periodismo, trabajando en el Centro de Estudios Históricos de Madrid. Su libro Visión de Anáhuac fue publicado en 1917.

En 1920 Reyes fue nombrado segundo secretario de la legación mexicana en España. A partir de entonces ocupó diversos cargos diplomáticos: encargado de negocios en España (1922-1924), ministro en Francia (1924-1927), embajador en Argentina (1927-1930), embajador en Brasil (1930-1936) y de nuevo embajador en Argentina (1936-1937).

Cuando Reyes regresó a México en 1939, se convirtió en presidente de la Casa de España en México, que posteriormente se convirtió en el Colegio de México. Fue uno de los fundadores del Colegio Nacional. En 1945 obtuvo el Premio Nacional de Literatura y fue candidato al Premio Nobel. Fue director de la Academia Mexicana de la Lengua de 1957 a 1959.

Las obras de Reyes que han tenido mayor éxito son Simpatías y diferencias (1921); La experiencia literaria (1942); El deslinde (1944), tratado de crítica literaria que se considera su obra maestra; y La X en la frente (1952). Sus obras han sido traducidas a lenguas extranjeras con mayor frecuencia que las de cualquier otro autor mexicano contemporáneo.

Reyes simboliza al humanista por excelencia. A su inmensa curiosidad intelectual y a su vasta cultura añadió un don de estilo que hizo peculiarmente suyas sus creaciones en prosa. Fue un crítico sabio y penetrante, un cuentista pródigo en sorpresas y un poeta de delicada sensibilidad; educado en la escuela de Góngora y Mallarmé, fue docto en escritores clásicos y modernos.

Reyes murió en la ciudad de México el 27 de diciembre de 1959. Fue enterrado en la Rotonda de Hombres Ilustres.