10 datos poco conocidos sobre las pegatinas de fruta
Aunque casi todas las piezas de fruta del pasillo de productos tienen una pequeña pegatina, la mayoría de la gente probablemente nunca les da mucha importancia.
Pues bien, aquí tenemos la oportunidad de recuperar el tiempo perdido. A continuación, 10 datos poco conocidos sobre las omnipresentes etiquetas.
Número 10. Son comestibles. Si has terminado de hornear una tarta de manzana entera y te has dado cuenta de que te has olvidado de quitarle las etiquetas a la fruta, no temas. Las etiquetas son perfectamente comestibles. Al igual que con las manzanas, se aconseja lavarlas antes de comerlas.
Número 9. El pegamento está regulado por la FDA. Los adhesivos que se utilizan en los alimentos están cubiertos por una subsección normativa denominada «Aditivos alimentarios indirectos»: Adhesivos y Componentes de Recubrimientos». En ella se describe con gran detalle qué se puede utilizar y cómo.
Número 8. Sus números tienen un significado más profundo, para que el cajero no confunda su rara manzana hawaiana de montaña con una simple pera roja. Los códigos de 5 dígitos que empiezan por un 9 se reservan para los productos ecológicos y los que empiezan por un 8 son transgénicos. Los identificadores de 4 dígitos se dan a las frutas que se cultivan de forma convencional.
Número 7. Una vez asignados, los códigos son fijos. Eso significa que no importa dónde vayas, los números de cualquier fruta específica serán los mismos. Por ejemplo, tanto si compra un 4030 en Portland (Maine) como en Portland (Oregón), acabará comprando un kiwi de tamaño estándar.
Número 6. Hay una alternativa de alta tecnología. Hace un tiempo, un hombre de Florida creó un láser que puede añadir la información necesaria del PLU a la fruta eliminando el pigmento de su capa superior. Hasta ahora, sólo se ha aprobado su uso en cítricos.
Número 5. Se han repartido muchos. Hay más de 1.400 PLU únicos sólo para productos agrícolas y artículos relacionados con ellos.
Número 4. Los artistas los utilizan como medio. Los artistas los utilizan como medio. Entre ellos está Barry Snyder, de Colorado, que organiza pegatinas de varios colores en mosaicos de iconos de la cultura pop. Al principio de su carrera las conseguía, junto con la fruta a la que estaban adheridas, en la tienda de comestibles. Ahora, recibe cajas llenas de coleccionistas de todo el mundo.
Número 3. Los códigos son asignados por la IFPS. Es la Federación Internacional de Normas de Productos. Antes de emitir uno, se realizan revisiones detalladas tanto a nivel nacional como internacional.
Número 2. No todas son utilitarias. En China, los agricultores colocan pegatinas con formas especiales en las manzanas jóvenes y las quitan una vez que la fruta ha crecido. Lo que queda es un mensaje o un símbolo de la suerte. Las frutas, conocidas como manzanas Rolls-Royce, pueden alcanzar unos cien dólares cada una.
Número 1. Se están preparando pegatinas multitarea. Un inventor neoyorquino está trabajando en la fabricación de una etiqueta de fruta que se disuelve en agua y se convierte en un lavado de fruta. Eso significa que los productos están limpios y que las pegatinas se quitan sin problemas, todo en uno.
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